«Padre, en tus manos encomienda mi espíritu», dice Jesús de Nazaret antes de morir en la Cruz. Han sido muchas horas largas de una eterna agonía.
Es viernes santo, día que, según la biblia, el Hijo de Dios fue entregado a manos de pecadores.
Como cada año miles de personas se dieron cita en el foro del barrio Las Lajas en Pachuca, para presenciar la representación número 45 del viacrusis. Son las 10:43 de la mañana, poco a poco comienzan a llegar las familias, los rayos del sol comienzan a salir sin cesar.
Dentro, de lo que parece ser una cárcel de madera se encuentra el actor, que representará a Jesús de Nazaret. Junto a él, se encuentran tres hombres, que serán Dimas, Gestas y Barrabas.Los preparativos llegan a su punto final. Hay al menos mil personas, en las escaleras se comienza a llegar de actores, que darán vida a los soldados romanos.
Piden a la gente abrir espacio. Se siente un ambiente de paz, fe y arrepentimiento. Son las 11:05 de la mañana, se escuchan los azotes, de lo que parece ser unas cadenas. Unos gemidos de fondo provocan un silencio estremecedor.
A instantes de iniciar la representación, sale el sacerdote del lugar, comienza una oración, un Padre Nuestro para ser especifico.
Todo se une en una solo voz, piden al de arriba que todo salga bien. Dentro de la Cárcel, Jesús, acompañado de quienes parecen ser sus familiares, se unen en un abrazo. Jesús ya ha sido declarado reo de muerte, ha sido golpeado, escupido, burlado, coronado como el «Rey de los Judios».
Ya es hora de salir, arriba de unos escolones ya están todos listos para realizar el juicio de Cristo, el mismo que un día antes fue aprehendido por autonombrarse «el Hijo de Dios Bendito» y fue entregado por uno de sus discípulos.
Al fin llegó el momento en que Jesús, con azotes, patadas y empujones, sale de prisión. Algunos de los presentes gritan, ante la escena tan ruda que están presenciando. Suben a Cristo hasta donde está el Sumo Sacerdote, este, como dicen las escrituras, dice que no le corresponde juzgarlo.
Ha pasado más de media hora desde que inició esta representación. La pintura con la que simula tener sangre Jesús comienza a escurrir de su frente.
Es tiempo de los azotes, el actor comienza a gritar de dolor. Parece ser sangre de verdad, el juicio está llegando a su fin.Jesús ya fue juzgado por Caifas y Pilatos, este ya se lavó las manos.
Los azotes ya se realizaron. Judas ya fue liberado. Al fondo se escuchan rezos, debido a que ya iniciará el Viacrucis. Uno de los soldados romanos carga la cruz. Es momento de iniciar con el trayecto.
El actor principal, carga la cruz. Los soldados piden que abran el paso, pues iniciarán con los pasajes bíblicos. El calor se vuelve más intenso. Inicia el Viacrucis, lo pavimentado de la calle termina y es momento de caminar sobre el cerro de El Lobo.
Las piedras, las ramas y las subidas se comienzan a hacer presentes. El caminar se vuelve cada vez más complicado, pues el camino es tedioso. El actor que representa a Jesús comienza a tambalear, es momento de la primer caída. La Cruz cae al suelo y comienzan los rezos.
El cansancio se hace presente entre casi todos los presentes. Algunas familias observan desde los laterales. Ya han pasado al menos dos kilómetros de trayecto. Es momento de una de las subidas más complicadas, el Cristo no puede más. Sus compañeros actores le ayudan. La Cruz comienza a ser más pesada.
El cansancio y el dolor no cesan, pero logra continuar su camino.Ha pasado más de una hora de que inició el viacrusis, ya han pasado varios pasajes bíblicos, algunos de los más relevantes son de cuando Simón de Sirineo, la Verónica, la Virgen María se hicieron presentes en el trayecto.
Ha transcurrido más de dos horas, ya se colgó el actor que representa a Judas. Los ladrones, después de haber sido azotador al final llegaron a donde serán crucificado. Llegan y se dejan caer, en sus espaldas se observa las marcas de los azotes.
A los diez minutos llega Jesús, ya cansado, semi desmayado y con marcas en el cuerpo llega a donde será crucificado. Las mujeres Santas le dan cobijo, le dan beber agua y descansa por al menos veinte minutos. Ya es momento de subirlo, los rezos se han presentes.
El cerro de El Lobo se ha llenado de gente, todos son testigos de la crucificación de Jesús de Nazaret. Esta escena dura por media hora.
Es hora de la última estación, son cerca de la 3 de la tarde y el viacrusis está llegando a su final. Jesús es bajado de la cruz y llevado a donde será su tumba.
Con esto, llega a su final una representación más del viernes santo en el Barrio Las Lajas en Pachuca.