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PlayStation se enfrenta a una demanda colectiva por el alto precio de los juegos digitales

Malas noticias para PlayStation, y es que la compañía se enfrenta a una demanda colectiva en los Países Bajos por los altos precios de los juegos digitales. No solo la demanda recoge este problema, sino que también menciona en alto precio del contenido digital dentro de los juegos. Es decir, las microtransacciones.
En concreto, la encargada de tramitar esta demanda es la fundación Stichting Massaschade & Consument. La cual emplea la legislación WAMCA para emprender demandas colectivas en defensa de consumidores. Actualmente, esta fundación tiene varias demandas colectivas abiertas con empresas como TikTok, por valor de más de 6.000 millones de dólares. Con Google, Airbnb y ahora PlayStation.
PlayStation se enfrenta a una demanda por su posición dominante y el alto precio del contenido digital

Según informó la propia fundación holandesa, se ha citado a Sony en una demanda colectiva en nombre de los 1,7 millones de jugadores holandeses de PlayStation debido a que la compañía explota su posición dominante en el mercado de consolas y niega a las posibles tiendas de aplicaciones el acceso a sus sistemas de juego. Básicamente, lo que ya está muy de moda. Que es ofrecer una plataforma cerrada evitando la competencia de precio.
El caso más reciente lo tenemos con Apple, la cual se ha visto forzada a permitir tiendas de terceros, e incluso pasarelas de pago externas. Lo que directamente conllevó a que los usuarios tuvieran acceso a juegos y aplicaciones más económicas al evitar pagar la comisión de pago del 30% de la tienda de Apple.
Según se indica, esta demanda colectiva es el punto y final a la campaña Fair PlayStation lanzada en febrero, que destacó cómo, en la generación de PlayStation 5, los consumidores se ven cada vez más empujados hacia consolas exclusivamente digitales, donde los juegos y el contenido dentro del juego solo se pueden comprar exclusivamente a través de la PlayStation Store. Esta posición dominante condujo al establecimiento del llamado impuesto Sony, con precios artificialmente altos que hacen que los jugadores paguen mucho más por los juegos digitales y el contenido dentro del juego de lo que pagarían en un mercado libre.
Se acusa a la compañía de explotar a sus propios usuarios

En la demanda colectiva a PlayStation, se recoge que Sony excluye a la competencia y explota a los consumidores y desarrolladores de videojuegos. En ambos casos, la posición dominante de PlayStation juega un papel fundamental. Y es que con un ecosistema cerrado, PlayStation puede hacer lo que se le antoje.
«La plataforma PlayStation funciona como un ecosistema cerrado («jardín amurallado») en el que Sony decide quién tiene acceso, en qué condiciones y a qué precio. Las tiendas alternativas están técnicamente excluidas en PlayStation, lo que hace que los jugadores dependan completamente de Sony a la hora de elegir.
Al mismo tiempo, Sony priva a los desarrolladores de su libertad de movimiento comercial. Los desarrolladores y editores terceros estarán obligados por contrato a comercializar sus títulos exclusivamente a través de PlayStation Store. También tendrán que dar a Sony la última palabra sobre el precio al que aparecerán sus títulos en el escaparate digital. Los desarrolladores pierden así su libertad para fijar su propio precio, pero también su poder de negociación como parte comercial».
La fundación se apoya en un estudio que indica que hay un perjuicio para los consumidores holandeses. Perjuicio que asciende a 435 millones de euros desde 2013. Se indica que la primera vista podría celebrarse a finales de este año. En ella se debatirá inicialmente la jurisdicción del tribunal holandés y la admisibilidad de la fundación. Si finalmente el tribunal estima las demandas, la fundación espera que esto obligue a Sony a abrir el mercado de venta de contenidos digitales de PlayStation a otros proveedores.
Fuente:elchapuzasinformatico.com