El alcalde de Tijuana, Ismael Burgueño, declaro el estado de alarma en una sesión extraordinaria del Consejo Municipal de Protección Civil, debido a la “condición Santa Ana”, que provoca intensos vientos provenientes del desierto en la zona norte de Baja California.
Burgueño destacó la importancia de actuar con rapidez para salvaguardar a la población ante esta situación que genera diversos riesgos.
Los fuertes vientos han ocasionado incendios, daños materiales y afectaciones al entorno natural, además de poner en peligro la seguridad de los habitantes.
Las autoridades locales instaron a la ciudadanía a seguir las instrucciones de Protección Civil y tomar las precauciones necesarias.
El Consejo Municipal afirmó que las acciones de respuesta se coordinan para atender las áreas más afectadas y reducir las consecuencias de este fenómeno.
Entre los incidentes más graves, se registró un incendio en la colonia Leandro Valle que dejó 30 viviendas destruidas, una persona fallecida y varios heridos.
A pesar de esta tragedia, bomberos lograron rescatar con vida a un bebé atrapado.
Durante el día, los servicios de emergencia respondieron a 24 eventos relacionados con la condición Santa Ana, incluyendo un incendio forestal en Villas del Prado y otro en una fábrica de Otay, ambos controlados sin heridos reportados.
Los vientos de Santa Ana, que suelen presentarse entre otoño e invierno, representan un riesgo significativo en la región debido a su intensidad.
Este fenómeno aumenta la posibilidad de incendios, afecta estructuras y deteriora la calidad del aire, impactando directamente a la población y su entorno.