Opinión
#ElAcentoDeHoy El ejército nuevamente es llamado a resolver el mismo problema que no ha podido resolver en 2 sexenios: la seguridad pública.
A contracorriente de exponer las razones y las ideas, un nuevo gobierno recurre al Ejército para solucionar un problema que en dos gobiernos anteriores no se pudo resolver, si acaso se agravo.
La exposición del personal del Ejército y la Marina en esa magnitud, haciendo cosas para las que no están formados, ha traído en la última década y media un alud de violaciones a los derechos humanos trágico para las víctimas y terrible para la institución.
Toda la evidencia, toda la historia, dice que no ha servido para cumplir con el objetivo de reducir la violencia. De esto han investigado y publicado en diferentes momentos de estos 15 años de violencia muchos académicos serios. Y, por cierto, no hay un solo estudio que diga lo contrario, lo mucho que ha servido el despliegue militar para la seguridad.
Luego entonces no esperemos resultados diferentes al final del sexenio, si se aplica la misma medicina para la pandemia eterna de violencia que vive México.
La violencia se disparó en 2006 con la idea de Felipe Calderón de mandar el ejército a las calles, hoy el gobierno que supuestamente representa lo contrario a Calderón hace exactamente lo mismo, esperando resultados diferentes, que no llegarán.
Foto: Sin Embargo Mx