Esta solicitud, que duplicaría el gasto actual, responde a la necesidad de afrontar desafíos clave como la transición ecológica, la digitalización y la Seguridad.
El Gobierno de España, liderado por Pedro Sánchez, ha propuesto en Bruselas un aumento significativo en el presupuesto de la Unión Europea (UE), que pasaría del 1% al 2% del Producto Interior Bruto (PIB) anual.
Esta solicitud, que duplicaría el gasto actual, responde a la necesidad de afrontar desafíos clave como la transición ecológica, la digitalización y la Seguridad en un contexto de tensiones geopolíticas y económicas marcadas por la guerra en Ucrania y las presiones comerciales de Estados Unidos.
La propuesta incluye aumentar las inversiones en sectores estratégicos como la Defensa, las interconexiones energéticas, la lucha contra el cambio climático y el desarrollo tecnológico.
Según el Ejecutivo español, el actual marco geopolítico requiere una UE más competitiva frente a potencias como China y EE.UU., que lideran en estos ámbitos. «La seguridad europea va más allá de las amenazas militares; abarca también ciberataques, el terrorismo y el cambio climático, que requieren intervenciones y recursos específicos», afirmó el Gobierno en un comunicado.
Financiación mediante deuda conjunta
Para materializar este presupuesto, España ha sugerido la creación de un «mecanismo de deuda conjunta» que permita financiar inversiones estratégicas de largo plazo. Además, propone refinanciar los fondos Next Generation por otros diez años para garantizar la continuidad de los proyectos de recuperación y transformación de la economía europea.
La petición se basa en recomendaciones como el informe Draghi, presentado por el expresidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, que subraya la necesidad de destinar 800.000 millones de euros anuales para digitalizar y descarbonizar la economía europea, además de fortalecer la defensa frente a amenazas externas como Rusia o las presiones de EE.UU.
Un debate complicado en la UE
El marco presupuestario plurianual actual (2021-2027) ya permitió un aumento temporal del gasto por la pandemia, pero las negociaciones para el próximo periodo (2028-2034) prometen ser tensas.
Países como Países Bajos y Austria, con Gobiernos conservadores o de extrema derecha, rechazan aumentar el gasto mediante deuda conjunta y proponen recortes en otras áreas, lo que podría dificultar la adopción de la propuesta española. Pese a las posibles resistencias, España busca liderar un debate que considera clave para garantizar el futuro de Europa como una potencia global sostenible y competitiva.
Fuente:es.euronews.com