Paradigma

La biblioteca personal de Genaro Guzmán Mayer en Pachuca; viajar a otra dimensión

El viaje al espacio de creación del celebre Genaro Guzmán Mayer

Estar en la biblioteca y en el escritorio donde el inconfundible hombre de las letras e ícono de la poesía hidalguense, Genaro Guzmán Mayer se sentaba a pensar, crear y estampar su pensamiento, es algo simplemente único, que atrapa a cualquiera que reconoce su portentosa obra, su legado literario y los ríos de tinta que salieron de su pluma mágica.

Saber que ahí se creó un mito, una leyenda de la que muchos hablan pero pocos conocen con profundidad es recrear lo que veía desde su cómodo asiento en el que pasaba horas exprimiendo frases al progreso, al amor y a la inmesidad de la vida

Quizá porque también soy escritor, pero experimentar tales evocaciones es como retornar en la propia creación literaria de los años 60 y 70 del siglo pasado, es ver en cada texto que aún existe en ese amplio librero, un mar de oportunidades que abría cada que quería nadar en las profundidades del pensamiento.

Muy pocos, incluídos sus vecinos de ahora, saben que un pequeño portón negro de madera de la calle Pachuca de la colonia Céspedes de la capital hidalguense, vivió Genaro Guzmán Mayer y que desde ahí, en un micromundo rodeado de libros y grandes ventanales, desarrollaba la obra que hoy enorgullece a los hidalguenses.

Pese a que su producción es de las más fecundas de las letras nacionales, al haber desarrollado casi todos los géneros desde la novela, la poesía, obras teatrales, ensayos, etc, el compositor de la letra del Himno oficial del estado de Hidalgo no tiene su biografía en wikipedia.

Pero volviendo a ee reducto de intelectualidad; seduce a otros que seguimos sus pasos, que admiramos al creativo, al intelectual que supo retratar y proponer, que no fue seducido por el poder pese a estar cerca de presidentes de la República como Gustavo Díaz Ordaz y Luis Echeverría, que mantuvo su integridad incólume.

Unos libreros con diversos volúmenes son más que conocimiento, son la puerta de acceso a una vida de quien nació en Actopan pero decidió ser pachuqueño por adopción, siendo finalmente hijo de Hidalgo y de México.

Salir de la versión móvil