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Maciel entregó millones a Juan Pablo II y combatió el comunismo por impunidad

México, 13 de enero.-Maciel entregó millones a Juan Pablo II y combatió el comunismo por impunidad, publicó el portal SinEmbargo, elaborado con testimonios de Alberto Athié, un ex seminarista legionario.
«El Papa Juan Pablo II recibió todos los días un reporte de la CIA (la agencia de espionaje del Gobierno de Estados Unidos) sobre las actividades pastorales cercanas a la Teología de la Liberación en América Latina. El mundo acababa de salir de la Guerra Fría, explica en entrevista Alberto Athié, pero la ideología hegemónica siguió durante años abriendo espacios y desactivando cualquier “amenaza” comunista».
Alberto Athié es un cruzado contra la pederastia y los abusos sexuales dentro de la iglesia católica. Se convirtió en la oveja negra por denunciar, durante años, los abusos de Marcial Maciel ante autoridades religiosas.
Pero no se envuelve en banderas ni de izquierda ni de derecha. El hombre de 65 años, de una barbilla canosa y bien recortada, asegura que él se identifica con el pensamiento de Mahatma Gandhi. Durante la entrevista lo cita un par de veces. Es un humanista espiritual:
Ahora, los Legionarios vuelven a ser generar controversia: el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador ha admitido que los investiga por lavado de dinero. En una extensa entrevista, Athié desmenuza una historia de complicidades que le ha permitido a la congregación tener tanta impunidad.
— ¿Por qué la iglesia católica no ha hecho nada sobre la pederastia y los abusos sexuales de los Legionarios?
— Yo tengo mi opinión, y es que Maciel les sirvió a ellos para lo que querían obtener: vocaciones, muchos recursos y, sobre todo, un anticomunismo muy cercano a Juan Pablo II. Maciel no sólo aportó muchos millones de dólares a la causa de Solidaridad en Polonia contra el comunismo, también operó aquí en México y en América Latina contra la Teología de la Liberación. Contra Obispos liberacionistas, como Samuel Ruiz, por ejemplo, contra teólogos y pastoralistas.
La Teología de la Liberación es una doctrina nacida en América Latina, caracterizada por sostener que el Evangelio exige la opción preferencial por los pobres, y por recurrir a las ciencias humanas y sociales para acompañar a pueblos y movimientos en torno a su liberación. Algunos religiosos cercanos a esta doctrina han sido vinculados a movimientos sociales e incluso a grupos armados en América Latina, por lo que se les ha llegado a considerar “comunistas”.
Athié asegura que los Legionarios de Cristo fueron utilizados por el Papa Juan Pablo II, la Primera Ministra británica, Margaret Thatcher, y el Presidente estadounidense, Ronald Reagan, para mantener a línea las ideologías de izquierda dentro de la iglesia católica.
CONFESIONES DE UN SACERDOTE
Alberto Athié fue sacerdote de la arquidiócesis de México durante años. Su devoción tenía una aplicación social muy profunda, más allá de las ideologías políticas. “A mí lo que me motivaba eran los valores del evangelio”. El hombre se dedicó, sobre todo, a trabajar con poblaciones marginadas. Pero su devoción católica se fue minando con el caso de Juan Manuel Fernández Amenábar.
Antes de morir, el padre Fernández Amenábar le contó que el líder de los Legionarios de Cristo, Marcial Maciel, abusó de él:
“Me dijo, ‘a mí, Maciel me destrozó la vida, la hizo pedazos. Yo estoy muy herido, no me quiero morir así’”.
Era 1994, y para Athié, aquella confesión era difícil de creer. Maciel era uno de los hombres más influyentes de la Iglesia católica. Por esas fechas, el Papa Juan Pablo II lo había nombrado como un “guía eficaz de la juventud” que “ha querido poner a Cristo… como criterio, centro y modelo de toda su vida y labor sacerdotal”.
Recordando a Ghandi, Athié le explicó al moribundo sacerdote que el perdón no significa olvido y que sin odio, también, se puede buscar justicia. Le pidió perdón en nombre de la iglesia católica y se comprometió a denunciar el caso dentro de la institución.
Cuenta que una de las últimas peticiones de Fernández fue: “te pido que en mi funeral les digas que yo he perdonado, pero que pido justicia”.
Fotos: Cuartoscuro