César Peña
Pachuca, 24 de diciembre.- Además de metales, ácidos y sulfuros en aire, agua y tierra de Pachuca y alrededores producto de la minería, existen 300 toneladas de mercurio, un potente metal líquido que fue fundamental para la extracción de plata y que puede ser letal para los humanos.
Un estudio dado a conocer en el año 2001 por el Instituto Nacional de Investigaciones Nucleares (ININ), reveló que la extracción de plata mediante el conocido método de patio, requirió la demanda de mercurio en grandes cantidades que fueron traídas desde América del Sur y Europa.
De acuerdo al estudio, muy pocas cantidades de esas 300 toneladas se pudieron recuperar, por lo que el resto se encuentra disperso en el suelo, el agua y el aire de la capital hidalguense, cuyos niveles de toxicidad deben ser los más altos del país junto a las ciudades mineras.
Marco Antonio Moreno Gaytán, presidente de la Sociedad Ecologista Hidalguense (Sehi), confirmó que el mercurio es uno de los compuestos que deambulan libremente en todo Pachuca, Real del Monte y zonas aledañas, sin que haya forma de ubicarlo.
«Está disuelto, en partículas, en el aire, el agua que tomamos, y sobre todo en los jales, esos montículos de tierra que aún contienen muchos de esos compuestos tóxicos», aseveró.
Los químicos han advertido que el mayor riesgo del mercurio es cuando se hierve en los procesos de extracción de oro y plata, pues pasa a la atmósfera y posteriormente a ser parte de la cadena alimenticia, llegando necesariamente al ser humano como advierte la University College de Londres.
Los daños en la salud es particularmente en los niños y fetos, que pueden tener daños irreversibles y hasta sufrir la muerte por este metal.
Afortunadamente, 93 naciones, incluyendo a Estados Unidos, han firmado el tratado de Minamata, diseñado para restringir la polución por mercurio lo que implica instalar equipos que lo recolecten en las chimeneas de las plantas de energía, de fundición y fábricas de cemento.
Significa también continuar la eliminación gradual del uso de mercurio en medicinas y equipos.
Pero lo más difícil, advierten los especialistas, probablemente va a ser romper el vínculo entre el mercurio y la minería.