Mundo
Militares dan espaldarazo a Maduro ante respaldo internacional a Guaidó
La Fuerza Armada de Venezuela dio este jueves un espaldarazo al presidente Nicolás Maduro, al calificar de “golpe de Estado” en marcha la autoproclamación del líder parlamentario opositor, Juan Guaidó, como mandatario interino con respaldo internacional.
“Alerto al pueblo de Venezuela que se está llevando un golpe de Estado (…) contra el presidente Nicolás Maduro, presidente legítimo”, aseguró el ministro de Defensa, el general Vladimir Padrino, flanqueado por la cúpula militar, señalando a “sectores de ultraderecha” auspiciados por “agentes imperiales”.
Poco antes, ocho generales que comandan las regiones estratégicas del país ratificaron su “lealtad y subordinación absoluta” al mandatario socialista. “Leales siempre, traidores nunca”, dijeron.
En una sesión solemne, el mandatario socialista también recibió el apoyo del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ, de línea oficialista), que el miércoles ordenó a la Fiscalía investigar penalmente a los miembros del Parlamento -de mayoría opositora-, al acusarlos de usurpar las funciones de Maduro.
“En Venezuela se está gestando un golpe de Estado con la anuencia de gobiernos extranjeros”, aseguró el presidente del TSJ, Maikel Moreno, en el acto al que también asistió el alto mando militar.
La Fuerza Armada, que se autodefine chavista y “antiimperalista”, es el principal sostén de Maduro, y aunque asegura estar unida, ha mostrado fisuras. En la más reciente, 27 militares fueron detenidos el pasado lunes tras sublevarse.
El miércoles, Guaidó llamó a las Fuerza Armada a ponerse “al lado del pueblo y de la Constitución” y les reiteró la oferta de amnistía a quienes desconozcan a Maduro. “Pero el mayor impedimento para que asuma en la práctica es el alto mando militar”, dijo a AFP el analista Diego Moya-Ocampos.
“La clave siempre ha estado dentro, en la articulación de la oposición (avanzando) y el apoyo militar (incierto). Pero ahora Maduro, por error, pone a la comunidad internacional en el máximo nivel de protagonismo. Y ahí tiene mucho más que perder”, opinó el politólogo Luis Vicente León.
La tensión política también se siente en las calles. Disturbios en el marco de protestas contra Maduro dejaron al menos 26 muertos desde el lunes.
Argumentando estar facultado por la Constitución, Guaidó, de 35 años, se autojuramentó el miércoles como “presidente encargado” para, dijo, “lograr el cese de la usurpación, un gobierno de transición y elecciones libres”.
De inmediato, fue reconocido por Estados Unidos, Canadá y una decena de países de América Latina, en tanto Maduro obtuvo el respaldo de sus aliados Rusia, China y Cuba. El presidente ruso, Vladimir Putin, lo llamó personalmente.
En una sesión sobre Venezuela, el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, llamó a la Organización de Estados Americanos (OEA) a reconocer a Guaidó. A título persona, el secretario general, Luis Almagro, le dio el beneplácito.
Estados Unidos fue más allá y pidió una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU sobre Venezuela para el sábado.
La UE, prudente, pidió “elecciones libres” sin reconocer a Guaidó, lo que sí hizo el presidente de la Eurocámara, Antonio Tajani, asegurando que “¡Maduro tiene que irse ya!”.
Guaidó, quien según una fuente de oposición “está en resguardo” en un lugar no precisado, seguía recibiendo mensajes y llamadas de apoyo de mandatarios, entre ellos el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, este jueves.
Medio centenar de países consideran “ilegítimo” el segundo mandato que inició Maduro el 10 de enero, por considerar que los comicios en que fue reelegido -boicoteados por la oposición- fueron fraudulentos.
De visita en Panamá, el papa Francisco dijo, a través del portavoz interino de la Santa Sede, Alessandro Gisotti, que apoya “todos los esfuerzos para ahorrar sufrimientos a los venezolanos”.
– Más que diplomacia, lo económico –
Como respuesta al decidido apoyo de Washington a Guaidó, Maduro anunció que rompe relaciones con Estados Unidos, y dio 72 horas a sus diplomáticos para abandonar el país, pero el gobierno estadounidense no reconoce esa decisión y anunció que tomará medidas si su personal es puesto en “peligro”.
En un comunicado a todas las embajadas, Guaidó, a quien Maduro considera un “títere” de Trump, les pidió “mantener su presencia diplomática”.
“Pero lo que verdaderamente afecta o pone en entredicho la capacidad de gobernar del régimen de Maduro son medidas de corte económico o financiero”, advirtió a la AFP el internacionalista Mariano de Alba.
Foto: Especial