Una niña de 11 años de Sierra Leona se ha convertido en la única sobreviviente de un trágico naufragio en el Mediterráneo, donde 45 personas estaban a bordo.
Su llanto y gritos fueron escuchados por los rescatistas, lo que permitió su salvamento tras haber pasado aproximadamente 12 horas en el agua.
La niña, identificada como Yasmine, fue rescatada después de que su embarcación se hundiera en medio de una tormenta.
El barco, que transportaba a 45 personas, se hundió en condiciones adversas.
La situación fue crítica, y muchos de los pasajeros no lograron sobrevivir.
Su estado de salud de la sobreviviente es estable, y está recibiendo atención médica.
“Fue casi un milagro que pudiéramos escuchar sus lamentos. Intentamos buscar otros náufragos, pero no había ninguno»
«Después de un día de tormentas, con 23 nudos de viento y olas de cinco metros de altura, era casi imposible”, dijo el capitán del velero, Matthias Wiedenlübber.
Cuando llegó a bordo estaba helada y temblando y “claramente en estado de hipotermia, pero aunque apenas podía caminar, estaba reactiva”, explicaron desde Trotamar III.
La menor contó a la tripulación del velero de la ONG que zarparon hace cuatro o cinco días de Sfax, en Túne.
En un barco que volcó debido al mal tiempo y terminaron todos en el agua.
Tras avisar a las autoridades, la niña fue trasladada inmediatamente a Lampedusa.
“En general su estado parece bueno. Creemos que permaneció en el agua unas doce horas”, explicó a los medios el médico del ambulatorio de la isla Mauro Marino que la examinó, donde le prestaron un teléfono para que pudiera contactar con su padre, que todavía está atrapado en Túnez.
Unos 356 inmigrantes desembarcaron en Lampedusa durante la noche, antes de que llegara al amanecer la niña rescatada por la tripulación de la ONG.