Felicia Tlalacalco cocinera tradicional prepara en el mes de noviembre tamales dulces de flor de cempasúchil con la receta que le heredó su abuela.
En la comunidad de San Mateo del municipio de Acaxochitlán, en la zona otomí-tepehua, tiene su cocina de humo, reúne los ingredientes desde su huerta para preparar tamales dulces y salados.
Lo que empezó como un sueño se convirtió en una empresa turística que va consolidándose por medio de su Conservatorio de la Cocina Tradicional de Acaxochitlán.
“Personas que desean vivir una experiencia de elaborar los elementos a través de ir ala recolección de algunas de las especies que vamos a utilizar, algunos elementos desde productos de la milpa, productos del monte”.
El esposo de Felicia, Fulgencio Vargas, explicó que la comida que se consume en el campo carece de productos químicos para su desarrollo.
“Lo decía, tenemos que dejar de depender de algunos elementos como transgénicos y poder regresas a nuestra esencia, nuestro origen, el tener un huerto donde podamos tener verduras, donde podamos tener hierbas”.
Es así como la cocina tradicional se posiciona para demostrar la riqueza cultural y gastronómica del estado de Hidalgo.
