Vecinos del sur piden el desalojo de supuestos paracaidistas en Pachuca

Cerca de las 6:00 horas de este viernes, vecinos de las colonias Ampliación San Antonio, La Palma, así como zonas aledañas, liderados por la regidora, priista, Olivia Zúñiga Santin, iniciaron un bloqueo sobre la carretera México-Pachuca, a la altura de la Casa de la Tercera, para pedir el desalojo de algunas familias, que presuntamente invadieron un predio, propiedad del gobierno estatal.

De acuerdo con los inconformes, desde el día 3 de junio más de una decena de personas comenzaron a levantar casas de lamina en un predio, ubicado cerca de la Casa de la Tercera Edad, lo que molestó a los vecinos, ya que ellos mencionaron, ese lugar podría ser utilizado como un área en común.

Por dicha razón comenzaron con el bloqueo, situación que provocó una gran cantidad de tráfico y algunos automovilistas trataron de dialogar con los inconformes para que abriera el paso de manera intermitente, a lo cual accedieron solo unos breves instantes.

Ante esto, el director general de Gobernación, Pedro Pelcastre entabló un dialogo con los manifestantes, a quien les pidió desbloquear la vialidad a cambio de una mesa de dialogo, sin embargo, ello no fue aceptado.

Por lo que el bloqueo continuó, lo que generó afectación para los automovilistas que tenían la necesidad de salir de la capital hidalguense.

Ante la negativa de los inconformes vecinos y con la amenaza de bloquear toda la arteria, elementos de la policía estatal arribaron para encapsular a los inconformes y solo así pudo ser liberada la vialidad.

Ante ello, los vecinos acordaron sostener una mesa de diálogo con funcionarios de la Secretaría de Gobernación y una comisión de diez quejosos se trasladaron a Palacio de Gobierno. En tanto, el resto de los manifestantes se movieron a donde está el predio en disputa y comenzaron a tiras las casas que estaban montadas.

Aún con sellas de prohibición para ingresar a la zona, algunos de los vecinos del sur desmontaron las estructuras de las pequeñas viviendas, de no más tres metros por tres metros.

En ese momento la situación se puso tensa, ya que algunos de los supuestos invasores comenzaron a tratar de defender sus casas y se registró un pequeño conato de bronca y golpe, sin embargo, la policía, que custodiaba la zona, calmó la situación.

Ya con los ánimos tranquilos las dos partes enfrentadas decidieron continuar vigilando el predio y hasta el cierre de esta nota la situación se mantiene igual.

Ello, mientras esperan los resultados de la mesa de diálogo con gobierno estatal para determinar cuáles son los acuerdos y trazar el camino hacía una solución inmediata.