Foto: CINAH Hidalgo
En San Agustín Metzquititlán se encuentran resguardados por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) unos vestigios arqueológicos, hallados en el mes de junio de este 2024, durante la construcción de la carretera federal 105, Pachuca-Huejutla.
El hallazgo lo hizo la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) del estado que dio aviso al INAH para realizar las acciones correspondientes de investigación, protección y conservación.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en Hidalgo, la Secretaría de Cultura del Gobierno de México emprendió un proyecto de rescate arqueológico por el cual, actualmente, el basamento piramidal está bajo resguardo y en proceso de investigación.
La estructura forma parte de un asentamiento prehispánico conocido como San Miguel, debido a la cercanía con el pueblo de San Miguel Metzquititlán.
El sitio ya ha sido catalogado y reportado ante la Dirección de Registro Público de Monumentos y Zonas Arqueológicos e Históricos del INAH.
Respecto a las medidas de conservación, el Consejo de Arqueología del INAH autorizó edificar un muro de mampostería de rocas, con junta de cemento, paralelo al perfil arqueológico que había quedado expuesto debido a las obras de infraestructura.
Tales acciones son necesarias para conservar el basamento piramidal y evitar un desgajamiento, así como continuar con las acciones de investigación y determinar con precisión su temporalidad, así como sus medidas, entre otras características arqueológicas.
¿Qué encontraron en la carretera Pachuca-Huejutla?
Hace unos meses, mientras se realizaban las obras de construcción de un tercer carril en la carretera federal 105, Pachuca-Huejutla, a cargo de la SICT del estado de Hidalgo, fueron hallados los vestigios de un basamento piramidal.
El INAH informó que el sitio patrimonial está compuesto por cinco sectores y, al menos, 10 montículos arqueológicos; su antigüedad media entre los periodos Epiclásico (650-950 d.C.) y Posclásico Tardío (1350-1519 d.C.).
En apego a los principios nacionales e internacionales aplicables en materia arqueológica, se realizó la documentación exhaustiva del sitio y del monumento, con el apoyo de drones para la elaboración de modelos fotogramétricos digitales.
En el sitio, informó el INAH, se han colectado 155 muestras de materiales cerámicos, malacológicos y líticos, de pisos de cal, carbón, tierra y madera carbonizada, que en meses próximos serán sometidas a estudios en laboratorio.
El hallazgo de dichos vestigios permitirá obtener información sobre la ocupación humana en la región de la Sierra Alta de Hidalgo, específicamente en la zona de la Barranca de Metztitlán.
De acuerdo con los especialistas, según la historiografía, los primeros asentamientos en este lugar se remiten, al menos, hace 14,000 años.
El INAH informó que los resultados preliminares de investigación se han compartido con instancias educativas de la región para contribuir a la concienciación del cuidado del patrimonio arqueológico.
