Conecte con nosotros

Opinión

México debe legalizar todas las drogas

Publicado

el

Economía versus Política

César Peña *

Tardíamente las autoridades mexicanas están reaccionando respecto a la aprobación de la marihuana recreativa y además a cuentagotas. Eso de aprobar la posesión de 5 gramos de esta droga desde mayo del 2022, es una despenalización raquítica, o dicho de otra forma, una criminalización con claroscuros, lo que está muy lejos de los reclamos de levantar todo veto desde la producción, distribución y consumo que se busca para avanzar en una solución al problema que desde luego involucra a todas las demás drogas.

                Mientras Estados Unidos sigue en su caminito de aprobar el uso lúdico como ya sucede en 19 estados, en México apenas estamos en pañales viendo si se le da a los consumidores permiso para su cultivo y portación personal. Estamos peleando para que no detengan a quienes lleven más de lo permitido mientras en Estados Unidos ya es una industria que está generando millones de dólares.

                Con nuestras pírricas reformitas al 478 de la Ley General de Salud seguimos igual que antes: Estados Unidos sigue poniendo los consumidores y dictando  el mercado y nosotros seguimos poniendo los muertos  lo que es intolerable a estas alturas en que no hemos entendido que en cada quien debe estar la decisión suprema de lo que se mete al cuerpo como sucede con el alcohol, la droga legal  que más accidentes y muertos provoca anualmente.

                No es que el agua no nos haya llegado a los aparejos; es que ya lo hizo y lo sigue haciendo con saldos rojos a diario, pero mientras se intenta arreglar con soluciones políticas y policiacas lo que es un problema de salud y desde luego económico, seguiremos buscando al gato negro en medio de la absoluta oscuridad sin encontrarlo.

                Tenemos que ir más allá de la aprobación lúdica de la marihuana y tener el valor para dar el paso para legalizar todas las drogas, por destructivas que suenen o por más satánicas que las pinten, para poder resolver este problema que ya ha dejado miles de muertos desde el sexenio de Felipe Calderón, cuando se declara la fallida guerra al narcotráfico.

                Somos además de moralistas analfabetas, un pueblo que poco entiende de los procesos  y la psique social en la materia y razonamos con una sola neurona al creer que al legalizarse todas las drogas todo el mundo saldrá automáticamente a drogarse, temor que por ridículo que suene, es repetido por muchos especialistas y gente en el poder.

                Ya basta de hacerle el juego a Washington sobre su prohibicionismo barato que sigue actuando a conveniencia mientras el resto del mundo sigue siendo un río de sangre en vez de ayudar a entender y solucionar el problema con otra óptica. Cuando ellos ven que es más rentable mandar armas que médicos y especialistas para atender el problema es cuando la cosa seguirá podrida por largo tiempo.

                México tiene que escapar de esta lógica malévola para poder completar el círculo de “abrazos y no balazos” y tenga sentido sólo el combate de la prevención  de las adicciones a través de campañas públicas y clínicas de rehabilitación ante lo que se prohíbe y ataca, pero sigue siendo algo omnipresente.

 * Economista, escritor y periodista