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Hidalgo

La teoría disidente del SIDA, los que sanaron desde los 90`s

Publicado

el

César Peña

Pachuca, 6 de marzo.- Recientemente se acaba de dar a conocer casos de que contagiados de VIH que se han recuperado, pero la teoría disidente del SIDA,  sugiere que los que sanaron desde los 90`s, pueden ser muchos más.

Encabezada a nivel internacional por Peter Duesberg, un virólogo investigador de la Universidad de Berkeley junto a otros investigadores norteamericanos y europeos, incluido Kari Mullis, Premio Nobel de Química por el desarrollo de la técnica de la reacción en cadena de la polimerasa, cuestionaron las afirmaciones de la teoría oficial.

Y es que desde 1984 todo lo que se conocía del VIH, salía de Robert Gallo, el investigador estadounidense que plagió el descubrimiento y la investigación realizada por los franceses Luc Montagnier y Françoise Barré-Sinoussi, quienes habían aislado por primera vez el virus.

Esta teoría oficial indicaba que el VIH era un virus, que se contagiaba por vía sexual y que atacaba el sistema inmunológico, argumentos que fueron inmediatamente cuestionados por los disidentes, cuya versión fue poco conocida.

A la par de la producción masiva de antirretrovirales para combatir el mal que se anunciaba como pandemia, la teoría disidente señalaba que el mal era más complejo de lo que se afirmaba, en el cual había varios factores más no ponderados.

Uno, que el VIH no podía ser considerado un virus, pues de acuerdo a los postulados de Koch – principios válidos para toda la ciencia médica-, un virus debe estar repartido homogéneamente en toda la población, lo que no sucedía con el SIDA, que ha estado preferentemente  en hombres.

Luego, que no bastaba con un solo contacto con una persona infectada para ser portador, sino que había estudios, sobre todo realizados en el primer lustro de los 90`s, que demostraban que había casos de personas  expuestas a factores de riesgo que no habían contraído la enfermedad.

Y a la inversa, portadores que no habían estado expuestos a prácticas de riesgo de carácter sexual, entonces la principal causa afirmaba la teoría oficial, por lo que se cuestionaba todo lo dicho hasta ese momento.

Se estigmatizó por ello, a la comunidad LGBTT, a quien se le imputaba el origen de el VIH y se regresó al modelo de la castidad y el sexo con una sola pareja, para pretender paliar el mal.

Sobre todo, por el periodo de incubación, que pasaba de dos años a cinco, luego 10 y luego más de 13, hasta que se registraron casos de personas que nunca desarrollaron el mal pese a ser portadores y sin haber una cura reconocida oficialmente.

En ese tenor estaba el ex basquetbolista de la NBA, Earving «magic» Johnson, quien ha sido portador llevando una vida estable y activa desde que en 1998 se le diagnóstico el mal.

La teoría disidente en México también realizó una intensa difusión a cargo de varios médicos y especialistas como el doctor Andrés Sierra, quienes conectaban el asunto con un mal que se gestaba entre quienes tenían defensas bajas y una mala alimentación, además de factores psicológicos de marginación.

Incluso, llegaron a presentar testimonios de enfermos que habían mejorado su salud pese a estar presuntamente en la fase terminal, casos que fueron poco conocidos.