#Opinión #ColumnaInvitada de Emma Fernanda Borrayo Montaño, “Generar un cambio en México a través de la cultura de la legalidad”

“Un país que no respeta sus leyes es un país débil”. El curso de la historia de nuestro país ha estado marcado por la debilidad al ejercer las leyes. Desde 1824 con la creación de la primera constitución política, se buscaba establecer orden en México. Lamentablemente, no se tenían las condiciones políticas, económicas y sociales para hacer que las leyes se respetaran. Lo que influyó para que años más tarde otro país se aprovechara de nuestra debilidad y provocara la pérdida de más de la mitad de nuestro territorio. Eventos como este se han repetido a lo largo de la historia de la nación. Por falta de conocimiento y cumplimiento de la legalidad nuestro país diariamente se enfrenta a actos de violencia, inseguridad, corrupción e impunidad.

La cultura de la legalidad es el interés por respetar las leyes que rigen la sociedad y fomentarla es uno de los elementos fundamentales para que exista progreso en el país. Tal como dijo Eduardo Sosa “el respeto a la ley, más allá de generar un beneficio personal, beneficia a la sociedad en su conjunto”. La mayoría de las personas prefieren quejarse y responsabilizar a alguien más de lo que sucede, pero, cómo podemos quejarnos de que algo no cambia, si ni siquiera conocemos las leyes que rigen el país. Si las conocemos tenemos la capacidad de respetarlas, y con ello tenemos el valor moral para exigir su cumplimiento.

Hoy, tú, yo y millones de ciudadanos más tenemos una participación activa en las decisiones que cada día quedan marcadas en la historia de nuestro país. Es el momento de identificarnos como integrantes de la sociedad y generar un verdadero cambio en la nación. Porque sí es posible vivir en un México en el que no estemos acostumbrados a escuchar que se cometen actos de violencia y corrupción; donde se respeten las leyes y no se permitan los abusos. En el que no hay injusticia y mucho menos impunidad.

Juntos, demostremos que México no es solo un ejemplo de lo que no se debe hacer para otros países. No veamos las leyes como algo aburrido e inútil, sino como una de las herramientas y armas para hacer de este país una gran nación.

Un país que respeta las leyes indudablemente es un país fuerte y hoy el país está en manos de la juventud.

Emma Fernanda Borrayo Montaño

Estudiante de Gobierno y Transformación Pública en el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey en Hidalgo.

Voluntaria para recaudar fondos y construir viviendas emergentes en Un Techo para mi país A.

Miembro fundadora de México Libre en Hidalgo.