Sánchez señala a las eléctricas tras el apagón: la privatización, en el centro del debate

El apagón de la semana pasada en España reaviva el debate sobre la privatización de Red Eléctrica. ¿Es la gestión privada el problema o son las políticas energéticas? Expertos analizan culpas, soluciones y el futuro del sistema eléctrico.

Este lunes se cumple una semana del gran apagón que dejó a millones de españoles sin suministro eléctrico durante horas. Cuando han pasado siete días de la crisis energética, el debate sobre las causas y responsabilidades sigue candente, con el Gobierno señalando a las empresas eléctricas privatizadas. Expertos y operadores apuntan a una combinación de factores técnicos y a malas decisiones políticas.

La Audiencia Nacional ya investiga el caso, y el foco está puesto en la gestión de Red Eléctrica Española (REE), la alta proporción de energías renovables y el papel de la privatización en un sistema energético cada vez más complejo.

«El sistema eléctrico colapsó»

Aunque han pasado siete días, todavía no hay una versión oficial de lo sucedido. Javier Dasí, experto energético, explica a ‘Euronews’ que «el sistema eléctrico español colapsó porque más del 60% de la energía inyectada ese día era renovable, principalmente solar y eólica».

Estas fuentes, aunque limpias, «son inestables frente a variaciones imprevistas», dice Dasí. «Cuando ocurrió la alteración, las renovables no pudieron estabilizar la red y, por seguridad, se desconectaron, provocando una caída en cascada«. Dasí descarta que la energía renovable sea «mala», pero subraya que su alta proporción, incentivada por políticas del Gobierno, desestabilizó el sistema.

El Gobierno señala a las empresas privadas

El Ejecutivo de Pedro Sánchez ha apuntado a las eléctricas privadas, como Iberdrola o Endesa, acusándolas de no haber respondido adecuadamente. Sin embargo, las corporaciones se defienden. En un comunicado, Iberdrola ha asegurado que «todas las centrales funcionaron según las indicaciones de REE».

Jorge Blanco, CEO de Ceiber Energy, señala al Gobierno: «Es inviable que miles de inversores fotovoltaicos fallen simultáneamente. Si hubo un pico de tensión fue porque REE, que regula la red en tiempo real, dio una orden errónea, como inyectar 15 gigavatios de golpe, lo que desestabilizó todo».

REE, por su parte, ha descartado un ciberataque, una hipótesis que el Gobierno sigue teniendo sobre la mesa. Dasí advierte sobre posibles «intereses económicos» en juego: «Si se demostrara un ciberataque evitable, REE tendría que asumir indemnizaciones millonarias. Por eso urge una investigación independiente«. La opacidad en las causas alimenta la desconfianza, especialmente porque, como señala Blanco, «nunca sabremos con certeza qué lo causó, pero técnicamente sabemos cómo ocurrió: una desincronización masiva».

La privatización de REE, donde el Estado conserva un 20% de la propiedad, siendo el accionista mayoritario, está en el centro del debate. Sánchez ha reabierto la discusión sobre si el sistema eléctrico está demasiado privatizado. Sin embargo, Dasí discrepa: «No es la privatización el problema, sino las políticas que priorizan renovables baratas sobre fuentes estables como la nuclear. El Gobierno tiene poder en REE y define la estrategia energética». De hecho, tras el apagón, REE redujo la inyección de renovables y aumentó la nuclear y los ciclos combinados para estabilizar la red.

Otro punto crítico es la falta de técnicos en la gestión del sistema. Blanco asegura que «REE opera con algoritmos y órdenes automáticas, pero si no hay expertos supervisando, un error mínimo puede colapsar todo«. Esta politización se refleja en la designación de cargos en REE, donde el PSOE ha sido acusado de colocar a afines, pues la misma presidenta, Beatriz Corredor, fue ministra de Vivienda en el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y, de formación, es jurista.

¿Cómo se podría haber evitado el apagón?

Dasí propone un equilibrio energético: «Aumentar renovables está bien, pero eso debe ir acompañado de más nuclear o hidráulica. Si seguimos cerrando nucleares, estos apagones serán más frecuentes». Blanco añade que REE debe mejorar sus protocolos: «Las subestaciones tienen protecciones, pero si el operador da órdenes erróneas, nada las detiene». Ambos expertos piden auditorías técnicas y menos injerencia política.

De cara al futuro, los expertos urgen una estrategia energética clara. «La nuclear es limpia y estable. Cerrar centrales es un error estratégico», insiste Dasí, recordando que países como Francia dependen de ella con éxito. Blanco aboga por «inversiones en digitalización y ciberseguridad para blindar la red».

El apagón ha evidenciado que el sistema eléctrico español es vulnerable aunque la presidenta de REE, Beatriz Corredor, lo considere «el más resiliente del mundo». La transición hacia renovables requiere una planificación técnica rigurosa, no solo decisiones políticas, dicen los expertos.

Mientras la Audiencia Nacional avanza en su investigación, los ciudadanos se preguntan si pagarán las consecuencias en sus facturas. Por ahora, como apunta Dasí, «los precios no se han disparado, pero la inyección de fuentes más caras para estabilizar la red ya está encareciendo el mercado eléctrico».

La energía es uno de los pilares fundamentales de cualquier país, pero en España el apagón del 28 de abril no solo dejó a oscuras a millones de personas, también iluminó las fisuras de un sistema que necesita una reformulación, según los expertos consultados por este medio. La pregunta es si el Gobierno y las eléctricas tomarán nota de lo sucedido o, como teme Dasí, si «esto pasará con más frecuencia».

Fuente:es.euronews.com