Opinión
Somos, no seremos, polvo de estrellas

Cesar Peña *
La frase creada para la posteridad de que tras nuestra muerte seremos polvo de estrellas, es una mera presunción, ya que la ciencia ha demostrado que en realidad ya somos residuos de una gran explosión estelar que regó sus componentes por todo el universo a partir de los cuales se generó la vida en La Tierra.
Sobre todo la teoría de la panspermia, muy retomada cuando se trata de argumentar el origen extraterrestre de la vida y que tiene muchos seguidores, pone al descubierto que desde el espacio exterior habrían llegado los elementos que habrían dado lugar a la vida debido a que tanto meteoritos y asteroides son ricos en componentes orgánicos.
Aún cuando en los primeros 500 millones de años de existencia de la Tierra ya había algunos elementos como hidrógeno, helio, agua y gases como el metano, faltaba mucho para que se desarrollaran las cadenas de aminoácidos necesarias para dar lugar a las bacterias.
En el año de 1969 cayó en Australia, el Murchison, un meteorito de 100 kilogramos de peso que tras analizarlo se descubrió que contenía cerca de 14 mil compuestos orgánicos y cerca de 12 de los cerca de 20 aminoácidos involucrados en la cadena de la vida.
Aunque desde siempre nuestro planeta ha sido bombardeado por diversos fragmentos estelares, llama la atención también el que cayó en México el 8 de febrero de ese mismo año de cerca de 2 toneladas de peso. Se trata de la condrita carbonácea más grande encontrada hasta la fecha que aún sigue siendo estudiada.
El ser humano por supuesto está repleto de todos estos materiales estelares como los son los compuestos básicos como el carbono, el hidrógeno, el oxígeno y el nitrógeno, presentes en todo el universo. Somos parte activa de ese universo y tanto en vida como en muerte, seguimos siendo parte de dicho universo, sólo que en distinta forma.
Hay que regodearnos por ser parte integral del universo y que para nuestra sorpresa, cada molécula que hay en nosotros es producto de un universo tan vivo como desconocido que en su organización, posibilitó lo que hoy llamamos vida y que se manifiesta en infinidad de formas.
Somos entonces, el universo pasado, presente y futuro.
- Escritor, periodista, economista y divulgador de la ciencia.







