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Trump elimina las protecciones para migrantes de Honduras y Nicaragua

El gobierno del presidente Donald Trump puso fin a las protecciones para migrantes de Honduras y Nicaragua que los ponían a salvo de la deportación y les permitían trabajar, en un último esfuerzo por despojar de privilegios a los migrantes desde que el presidente Trump volvió al poder.
La decisión del Departamento de Seguridad Nacional de poner fin a las protecciones para los migrantes de esos países.
A través de un programa conocido como Estatus de Protección Temporal (TPS, por su sigla en inglés), entrará en vigor en unos dos meses.
La agencia calcula que unos 72.000 hondureños y 4000 nicaragüenses tienen el TPS, aunque unos 21.000 hondureños y 1100 nicaragüenses.
También han obtenido tarjetas de residencia permanente, conocidas como green cards. Los migrantes de esos países estaban amparados por el TPS desde 1999.
Trump ha criticado durante años el programa TPS, destinado a proteger a los migrantes de la deportación.
Si sus países de origen se enfrentan a catástrofes naturales o conflictos.
El gobierno revisa periódicamente el estatus, pero puede renovarse sin límite, con el efecto de dar a los migrantes la capacidad de permanecer durante un periodo indefinido.
“El Estatus de Protección Temporal se diseñó para ser eso: temporal”, dijo en un comunicado Kristi Noem, secretaria de Seguridad Nacional.
“Está claro que el gobierno de Honduras ha tomado todas las medidas necesarias para superar los efectos del huracán Mitch, hace casi 27 años”.
Los ciudadanos de Honduras y Nicaragua recibieron por primera vez la protección después de que los países fueran azotados por el huracán Mitch en 1998.
“Honduras ha realizado importantes progresos en la recuperación de la destrucción causada por el huracán y ahora es un popular destino turístico y de inversión inmobiliaria”, dijo la agencia en un aviso del registro federal.
También señaló que Honduras había creado un programa para acoger de nuevo a sus ciudadanos.
El gobierno de Trump ya ha tomado medidas para poner fin al TPS en varios países, como Haití, Venezuela y Afganistán.
Los defensores de los migrantes dijeron que la decisión provocaría el caos entre los migrantes que llevan mucho tiempo viviendo en Estados Unidos.
“Al igual que las decisiones relativas a Afganistán, Haití y Venezuela, esta medida del gobierno de Trump arrojará a decenas de miles de personas a situaciones precarias».
«Por no mencionar las repercusiones subsiguientes para los empleadores y las comunidades que han confiado en muchos hondureños y nicaragüenses que llevan años viviendo y trabajando aquí”, dijo Robyn Barnard, directora de defensa de los refugiados de Human Rights First.
Los tribunales federales han bloqueado los intentos anteriores del gobierno de Trump de poner fin al programa.
La semana pasada, una jueza federal bloqueó su finalización para los haitianos, y afirmó que no tenía autoridad para recortar las protecciones antes de tiempo.
En marzo, un juez federal también bloqueó la supresión del TPS para los venezolanos, pero la Corte Suprema suspendió esa decisión a finales de mayo.
Fuente: nytimes